Las puertas se abren de par en par
Ojos del vacío lloran afuera
En el frío blanco del invierno interminable
Minuto a minuto acumulándose
En un alto montón que soplara el viento
es como se abre un corazón
En pétalos obscuros de sangre
Trémulo torrente
Este río caliente y subterráneo
abre los ojos al amor
abre los ojos al amor
ese congelado mundo es así
La tumba es obscura
Callada soledad la delimita
Metal que orada la tierra
Miradas que te siguen culpable
afuera en los ojos del mundo
lo transparente y lo profundo
lo que flota y lo que cae
lo que nace y lo que muere
lo que es y no es
dolor exquisito y tenue amor
Te veo siempre
Te amo siempre.
Jorge P. Guillen.
Texto agregado el 17-02-2008, y leído por 84
visitantes. (2 votos)