|                                    Tus labios, cual pétalos finos,me roban el aliento, mi afán,
 mi alma suspira en caminos,
 contemplando tu dulce imán.
 Al ver tus ojos chinescos,
 donde el universo reposa,
 me pierdo en reflejos frescos,
 siempre con ternura dichosa.
 
 Tras un cristal, mi amor callado,
 observa tu andar sereno,
 solo un suspiro anhelado,
 mi alma en tu paso, su pleno.
 El miedo me quita la voz,
 mi labio se cierra impaciente,
 mas mi mirar, ferviente,
 te sigue eternamente.
 
 Contigo río, mi alegría,
 contigo lloro, mi pesar,
 esta secreta fantasía,
 no deja mi ser de anhelar.
 Soy sombra que te contempla,
 un eco que nunca se escucha,
 mi amor, que en silencio se tiembla,
 hacia ti, mi anhelada lucha.
 
 Al verte pasar, mi destino,
 mis ojos te buscan sin tregua,
 mi amor, puro y cristalino,
 mi alma en tu aura se ruega.
 Un querer que no se declara,
 solo un latido profundo,
 y mi mirada que ampara,
 tu paso por este mundo.                        NTG.
 
 |