Te pienso solo porque te conozco, quiero tenerte, suspirarte, añorarte, me caigo porque me llevas, estremeciéndome por que lloro, me lloras, me añoras, te adoro. Sigo caminando entre dunas, semblantes marcados por pisadas de gigantes desaparecidos por estremecidos suspiros, jadeantes de deseos hipocráticos, promesas neófitas llenas de ti, de mi, sueños reclamando el futuro del pasado atrasado, publicando horarios perdidos en la llanura de nuestras entrañas, pidiendo perdón y permiso para un ensordecedor alarido de dolor y compromiso.
Acompáñame al día suicida, remembranza del pasado y añoranza del presente, recarga tu codo sobre mi sien, acomodando mis recuerdos en tu placer, en tu ser, en mi ceder por la existencia retrazada de la nostalgia, conviviendo con paredes dibujadas por el pensamiento, trascendiendo en la inmortalidad del cangrejo recobro fuerza en el sentimiento esporádico del zen.
Ayer comí unos ricos tacos de pastor, tu comías bistec y tu acompañante arrachera, ahh que bonita pareja!!!
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