No Soy Para Ti…
© Raymond

Eso que tú anhelas, puede ser inalcanzable.
Y estando tan lejano… más aún lo añoras.
Quien te ama… te puede parecer desagradable,
Que estando tan cercano a ti, así lo ignoras.

¡Que no soy hombre para ti! Dice la gente,
Y me buscan los defectos con gran goce.
Ellos nunca me han tenido así, de frente.
Sino eres tú, quien realmente me conoce.

Si dicen que no tengo qué ofrecerte,
¿Qué me sobra a mí, que a ti te falta?
Acaso tu corazón ya no me siente,
Confiésalo mujer… pero en voz alta.

Quizás no valgo lo que tú mereces,
Pero siempre estuve allí cuando lloraste,
Tranquilizando tu dolor, lo hice con creces,
Qué pronto, mujer, ya lo olvidaste.

Tus ojos gritan lo que tus labios callan,
Y tu intelecto rechaza lo que tu corazón exige.
Asegúrate mujer dónde tus sentimientos vayan,
Y nunca olvides… lo que con amor siempre te dije.

Si es el corazón quien te lo grita, no te engañes.
Escúchalo muy bien y no lo ignores.
Que si no puedo evitar que tú me dañes.
Tampoco he de exigirte que me adores.

Si no soy hombre para ti, no me lo ocultes.
Que sea tu hablar claro y conciso,
Si yo no tengo lo que buscas, no me culpes.
Acaso es porque yo… no lo preciso.


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