de RUFINO TAMAYO ROJAS, el más grande de mis personajes y demás

Ser supersticioso es parte de un santo egocentrismo
O de una absoluta vanidad irremediable
Que viene jodiendo desde hace tiempo
Y se expande como trinchera sin fronteras
Sin nebulosas o neblinas simplemente se expande

Desde mi signo Tauro hasta la hora innata del reloj perezoso
Como una realidad alternativa basada
en suertes y azares predeterminadamente dichos
expuestos y aceptados por un todo
con tal de venir a llenar esta nada con utopías

ese todo está muy lejos de mí alcance y comprensión
es como un dios sin necesidad de serlo
una chispa adecuada o un total Boom
cuyos destellos suelen tener orden y sentido
ya los ponga una gitana o lo ordene el zodiaco del día

es calma y paciencia o conciencia y Karma
regocijadamente buenas y sobre todo
cuando hacen que uno no se sienta culpable
así lo quiso el destino yo no metí las manos
que paguen justos por mis blasfemias pecadoras

llega el momento en que te sentís libre con libertad planeada
que deja de serlo cuando te das cuenta de que
así como en la Biblia todo está escrito
tenés que seguir algo lleno de flujos
pero saturado de contraflujos y semáforos con altos