Desde que te vi aquella tarde, sentí una cercanía con tu alma, con tu espíritu, se que no era casualidad que llegaras a encontrarte con la mía, pues lo prometimos en otra vida, es ahí tanto cariño y nuestra proximidad tenia su razón de ser, era el momento justo, pues pasábamos por situaciones complejas en esta. Nuestra promesa en el pasado era estar cuando lo necesitáramos para apoyarnos, entendernos y cuidarnos, fue tan del corazón esa promesa, que hoy aquí estamos para cumplirla, tu lo has hecho con creces, no sabes cuanto me has ayudado en volver a vivir esa pasión que se había extinguido, no imaginas cuanto necesitaba que tu, me sintieras, desearas y amaras con la fuerza que lo has hecho, todo aquello en este poco tiempo que hemos robado a esta vida, digo robado, pues esa es la verdad, no nos pertenece esta vida juntos, no era para estar hoy unidos, se nos ha dado este paréntesis como un regalo del universo por el amor que hemos sentido siempre. A lo mejor esteremos junto en la siguiente, y si es así, te daré mi amor con toda mí fuerza para cuidarte y protegerte y hacerte feliz durante toda ella, espero por mí parte haber cumplido con mi promesa y haberte hecho feliz también en este tiempo que hemos estado juntos. Ahora para concluir con nuestras vidas actuales, debemos continuar con ella y así poder seguir creciendo y evolucionando. Te amare por siempre preciosa mía, y recordare estos momentos como tantos otros que hemos tenido ya en otras vidas, y así cuando te encuentre de nuevo en el futuro, no haya dudas y sepa que tu eres la mujer que Amado por todos los tiempos de nuestra existencia.

Se despide de ti, tu hombre, que ya sabes que te amado en el pasado y te amara por siempre.