ARMONIA DEL CAOS
Desde niño habìa admirado esos lugares tan silenciosos y magicos que se llaman bibliotecas, en su escuela habìa una, y siempre que entraba le invadia una sensaciòn de acogimiento y sorpresa, porque en su mente infantil no llegaba a comprender para que servìan tantos libros apilados y perfectamente alineados en los estantes.
La maestra siempre les aconsejaba que concurrieran a la biblioteca para consultar los textos, pero nunca se animò a pedir uno, temìa romper la perfecta armonìa que representaban e imaginaba que sacando uno, el caos se producirìa y ya no serìa posible volver a la situaciòn anterior.
Cuentan que un dìa lo vieron sentado, dibujando los estantes, y los lomos de los libros, dandole el color de cada uno, y la proporciòn exacta que les correspondìa en el total.
Una vez contò que, un sueño recurrente era, èl sacando un libro, y los otros cayendo en forma desordenada sobre su cabeza, para despuès tener que arreglarlos uno a uno, sirviendose del dibujo que habìa hecho.
Sacando cosas viejas de los cajones, encontrò ese dibujo y su hijo le preguntò que era.
Le dijo: papà, que lindo dibujo, no sabìa que dibujabas tan bien.
No hijo, nunca me gustò dibujar, pero este papel muchas veces me salvò la vida. |