Inicio / Cuenteros Locales / DePaula / RESGUARDO DEL VIAJERO
En Barcelona me escondía en Santa María del Mar a escuchar al organista, y todas sus columnas eran los nervios de ese órgano; en Londres descansé serenamente rodeado de cuervos; peregriné a Montparnasse para leerle a Baudelaire uno de sus poemas en oración lasciva; la madrugada de Madrid sirve el mejor café para fugitivos; he dormido junto a la mujer más hermosa y cruel que conozco mientras afuera esperaba, repentina, Granada en nieve; Praga se me quedó a orillas de un aeropuerto; y no hablaré de mi Catedral, a la que anduve hasta deshacerla.
Escribo esto en un cuartucho de hotel. Es igual a esos en los que te sentabas sobre la cama vestida sólo con un cigarro. Y me mirabas. Pronto se hará de día, pero es que apenas si logro conciliar el sueño ahora que ya no estás a mi lado para impedirme dormir.
Ahora, que tus pasos alejándose han dado tantas veces la vuelta alrededor del mundo que me dejaste, desierto como tu vientre.
|
Texto agregado el 10-02-2008, y leído por 142
visitantes. (0 votos)
Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login
|