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Vendaval árabe
de tintineos refulgentes
sensaciones deshiladas
vientos soplando peces azahares
y palmeras insomnes
en mi mustio patio interno
La niña
ojos crepúsculo de miel
desvela tules
de ombligo al sol
esfuma presencias
A las seis de la noche
desapareció de mi olvido
el azar evitó el desencuentro
de recuerdos que murieron
porque nunca fueron
La mirada posé
en su vientre de mar
ella no sabe quién la corrió
al fondo de mi confusión
al cielo de luces rojas
grávida de vodka
y rencor
rompió su pacto de feminidad clandestina
Hoy el tiempo navega lento
enanos del destino
virtuales segundos y minutos
discurren a contramano
del silencio incómodo
de su aroma elemental
Apología de latigazos
es la vida
voluta sus pies escurridizos
veloces
de libertad azul
como acertijos de espejos aceitosos
de pecados indolentes
enquistan redes de miserias
de la mujer que busca
La música
es rocío
afán indeseado
a plegaria mal cosida
Laberinto bifocal
es la vida
corroe el alma monocorde
de mi espina dorsal
susurra áspero
siento en mi carne
malestar de entresijos boquiabiertos
carraspean un antes y un después
de aquella historia
confusa como tu boca
que no es mía
ni es necesidad hecha pliegue
o lástima
Boscosas convexidades del ser humano
es la vida
deidades finitas
arropan arco iris amargo
a elixir del qué dirán
tímida utopía
amaga acordes olvidados
ocre palidez lo que fue
sotana de dios la brisa
cubre la tierra
tu noche sola me roba mil amaneceres
la boina naranja desparrama
el negro telón de fondo
de cada noche
de todo día
Capturo huellas y rayos
cinceles y martillos de gusto acústico
siesta adolescente
abusos mercenarios
rayuela de Julio y setiembre
climax y ambición de calendario inmortal
Desarma miserias
así es la vida
Miro ser mimado
pintor de cepa y letra gorda
A página blanca
enredo rascasoles bufandas de verano
y vendimias de valle solapado
Fue una casa de migas de pan
hollejos al piso
y al cielo de tierra
salto irónico
pluma de tempestades
lágrimas sin leyendas que secuestrar
Tiempos incómodos
sin rastros
muecas antagónicas
hilos de fracasos implacables
como aquellos paisajes
de Aninga sin saciedad
Cronos dejó vacíos
palabras desprosadas de tiza azul
impronta de lentas biografías
que hacen tiempos
tantos como dura el amor
de piel descalza y vaivén dominical
Ignotos versos
mal barajados
la orilla de mi pueblo
es nieve y agua de verano sin cesar
no hay humedad de sábado y cafetín
ni tango nuevo
Y la vida pinta
encuentro oliva
libre de lumpen amor
enigmas de ensueños desflecados
lombrices aleteando
diversos sinsabores
Anaquel evanescente
cobija arpegios
soledades inundadas de ausencias amarillas
Van Gogh hipa scherzo suicidio
torpe estomacal
mitológica realidad
de lágrimas turgentes
amor pastel y óleo añil
Qué seremos sin girasol …
Que me alcanza
Nano Gutierrez
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Texto agregado el 01-02-2008, y leído por 79
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