Ansias. Hiperactividad sin objeto o actividad del objeto sin mí. En mis manos, en mis sueños, en mis rodillas…, como cuando mi sonrisa no es posible desde mi ignorancia atrevida, ingrávido hecho que consiste en un peso que aún no cargo. O como cuando el silencio de tus labios se encarna en tus labios mismos… Ellos, entonces, se hacen viento, viento intraducible, que siento, que acampa en la superficie de mi ser, y allí cosquillea, porque no puede entrar…
Sólo de oídas, ropaje confuso de tu ausencia. La causa y el medio, mi memoria y mi instante, lo oculto en lo oculto. Doble tarea: Doble fiera: un león que reina y un siervo que piensa. Fiera que pasea por su infinito reino, montado en el sin fin pensamiento de quien quiere reina ya, por lo menos, su ser…
Y sólo de oídas, ahí van, jinete y corcel, unidos. Como cuando mis ojos no se separan de la imagen que ya no es tuya. Tiembla la tinta, tiembla el papel, cae la idea y caigo en la unidad de no poder unirme a ti…
Esas son mis ansias
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