CENIZAS EN EL CORAZON




Las horas pasan
lentas en tu recuerdo
y salpican las sobras
que olvidaste,
ahogando a los animales
que se esconden de tí y de mí,
intoxicándose con hojas secas
de la planta de jazmín,
que se marchita en el balcón.

-No le temo a la muerte-

Temo a los parasitos,
que se apoderan de las almas
hasta volverlas piedra,
esos pequeños seres
que se metamorfosean
y por segundos nos distraen
de nuestra realidad,
esos diminutos humanos,
que esconden sus dientes
para devorarnos,
hasta dejarnos tan solo
un par de huesos alocados,
que no saben donde acampar
sin su cuerpo terrenal.
Temo a las cenizas en el corazón,
a los espejos que ya no me reflejan,
a los vocablos que sin musica
pasean por el margen absurdo
de un cuaderno sin fe.
Al dolor de la piel
por la distancia de un beso,
a las puertas que separan
a mi figura de mi yo,
al sonido de un tren a lo lejos
llevándose la verdad
que nunca servi en la mesa.
Las horas pasan
lentas en tu recuerdo,
y un presagio de olvido
esta golpeando mi ventana
y mis manos heroicamente,
dejaran entrar la luz del sol
en este amanecer lleno de agua...