Mira hacia abajo, Thales de Mileto que de tanto mirar a las estrellas pisas en falso y vienes y te estrellas con las tesis del necio Filocteto. Sabes de los eclipses el secreto y sin entrar en fútiles querellas compras aceite y hoy tras de tus huellas varios filosofistas ven un reto. Fuiste el Rey de los higos, mercancía que copaste en los tiempos de sequía sin explicar tus causas ni razones. Oh primer mercenario de la ciencia siglo a siglo más triunfa tu docencia de inventarios y de especulaciones.
Texto agregado el 19-01-2008, y leído por 258 visitantes. (1 voto)