Encontré una respuesta en el viaje, 
encontré un mensaje en el primer vagón 
que se dirigía al destino. 
Transformaba los pasos 
hacia un recuerdo perdido, 
un recuerdo infinito, quebrado  
y sin destino, 
sin destino olvidaba la razón, 
y sin razón suprimía lo distinto. 
 
Un cuadro con sentimientos  
ambiguos, con melodías 
y soledades que forman tu abrigo, 
que se forman al olvidar el encierro 
que esta atrapado en tu abismo... 
 
y gritar, 
gritar desde la tierra 
hasta las estrellas, 
regresar,  
y regresar buscando 
la creación,  
revivir el mundo, 
sobrevivir en el suelo, al que asesinaron 
con aquella explicación, 
y con contemplación  
destruyen en tus propias manos 
el sueño que construías, 
con tu esperanza, con tus 
amuletos extraños. 
 
Volabas, y 
volabas por el universo, 
eras libre, del encuentro, 
libre del encierro 
y de las heridas que aprisionan tu corazón, 
q llenan de cemento tus venas, 
q forman la explicación, 
explicación que conduce  
los caminos y en lo que circula, 
circula el tiempo, 
las esporas forman el peso 
y lo que tendría que importar 
ya no es cierto. 
 
Esa es la razón, 
razón para volar, 
para lograr, 
para triunfar en la lejanía 
de lo que tendrías, 
y mientras lo tengas 
lo que tendrás... 
en tu vida.  |