Como se terminan todas las cosas
Como se termina la gaseosa de la botella, el café del pocillo, o el paquete de alfajores.
Se terminó como el agua del termo para que no tomemos más mates juntos.
Como se termina la lluvia. Aunque la lluvia, vuelve a empezar, pero pronto termina otra vez. Todo, en realidad empieza y termina.
No sé por qué creí que nuestro amor era para siempre. Si ya sé que nada es para siempre, cada segundo que pasa no vuelve, pasa y se termina, y empieza otro. Pero yo no quiero que empiece otro. No quería que este se terminase, porque no puedo estar sin vos.
Porque en cada cosa que nos gustaba a los dos, te veo, en cada pedacito de mi cuerpo aún siento tus caricias, en mi boca todavía siento el sabor de tus besos y me tocó a mí decir que se termine. A mí, justo a mí, y te lo dije mientras se me desgarraba el corazón a pedazos.
Y ahora? Se terminó, se terminó en serio y me invade el dolor, la soledad, me invaden los recuerdos, me invade el olorcito de tus sábanas, el recuerdo del chocolate compartido, tu brazo sosteniéndome, todo vos cuidándome como si fuera de cristal para que no me quiebre. Pero igual me quebré, explotó mi angustia y el cristal se hizo añicos.
Y ahora…? Y ahora se me está estrujando el corazón, mis lágrimas caen sobre el teclado de la compu y escribo, escribo, porque ya no voy a tenerte para decirte una y mil veces más, aunque no te guste, que TE AMO.
Mi TE AMO, no se terminará…porque el amor llega muy adentro y es difícil querer sacarlo. A mí se me metió en las entrañas, se hizo un ovillito y encaprichado no quiere salir. Y aunque quiera, aunque se le vaya el capricho, no lo voy a dejar salir, porque fuiste una de las mejores cosas que me pasó en la vida y no te voy a dejar salir de mi cuerpo tan fácilmente, únicamente que vos vengas a buscarlo y lo volvamos a compartir; de otro modo, seguirá siendo sólo mío.
El tuyo se terminó. O nunca existió.
El mío…no quiero que se termine.