La Prisionera.

La moralidad sin pudores de M.N. Sheila. causó controversias. ¿Por qué condenarla? si murió salvajemente asesinada a sangre fría.
Ha visto lo inusual de las redadas de aquella noche furtiva en la que M.N.Sheila cedió su virginidad al despiadado que se aprovechó de ella. Sin embargo, no es así que se llegó a la conclusión de que en realidad M.N. Sheila no fue la esporádica víctima de una noche de sexo desenfrenada, tan sólo de las circunstancias, de la confusión, de quien sabe que. Recordando las palabras de Goethe en Fausto:
- ¿y tú quién eres?- y Mefistófeles contesta: "Yo soy la parte de aquella fuerza que siempre quiere el mal y sin embargo acaba haciendo el bien". Me atrevo, a confirmar la teoría esbozada con disimulo por parte de R. William Thompson, quien señala en sus palabras la contradicción que compete a M.N Sheila cuando ella misma dice: "Yo esa noche estuve con mi novio", hay motivos suficientes para afirmar que lo que en realidad quiso decir es "Yo esa noche dormí con un asesino". La frutilla del pastel se tambalea de acuerdo a la posición del barco. Ella no durmió con su novio aquella noche, y como dije, tampoco fue la víctima. "Yo dormí con el, pero no era mi novio", parece querer aludir a la verdad, cuando el señor R. William Thompson sostiene fervorosamente haber mantenido relaciones con ella, si esto es así, se confirma que no durmió en su casa, y tampoco con su novio."Bebimos champaña, nos reímos un rato, y nos revolcamos desatando nuestra lujuria". El beso que crece en la penumbra es una cita que el supuesto novio de M.N Sheila decía desde sus labios todos los días a la señorita, y ella no recuerda el motivo de eso nada. La historia se complica aún mas cuando una cuarta persona de sensibilidad dudosa reconoce en las huellas de su colchón a I.V.M de Isabel, comparándola con una prostituta, o bien confundiéndola con una. "Presa de ti, como loca, me aferro al sentimiento" "No quiero formar parte del recuerdo, quiero ser tu presente, y si soy tu recuerdo seré una espina y como toda espina puede extirparse" , en la pesimista frase de amor podemos ver la fotografía de una mujer, consciente, que lejos de querer romper su relación, relación que puede romperse, busca mantenerla, afianzarla, hacer que perdure en el tiempo. Esta clase de lazos, son enfermos, pero productivos para el inicio de un romance. Ella no ha tenido nada que ver desde el punto de vista ideológico, en cambio, si desde el personal. Se sabe de antemano que su relación con la difunta rozaba el odio. Se servía de múltiples pretextos para ocasionar muerte semejante, a pesar de que no hay una prueba fehaciente de ello. Su tío sostiene que la pudo matar el mismo amante con el que mantenía un idilio clandestino, pero tampoco hay pruebas fehacientes que confirmen que haya sido infiel. La muestra de semen en el cuerpo de la víctima deja dudas respecto al homicida, no se pudo comprobar con certeza a quien pertenece. Lo que si es cierto que la noche anterior al crimen la víctima tuvo relaciones sexuales con alguien. Que culpa habría tenido de engañar a su amante, hombre o mujer, para que pensáramos en una venganza amorosa, no lo sabemos. Una mujer respetable, no tenia problemas con nadie, así la catalogaban sus amistades laborales y en su vecindario privado. Hay quien dice todo lo contrario, a esa mujer no la podía ver ni en pintura, era mujer de hábitos extraños, engañaba a su esposo, tenia docenas de amantes y no se llevaba bien con sus vecinos. Como en el juego de quien es quien, es difícil precisar entre tantos quien sentiría rencores hacia ella, o quien, porque si, quiso matarla, y eso hizo, en efecto, la noche del 22 de diciembre del 2006. La investigación no gira rápido, la rueda es lenta, estamos en la pista de dar con quien posiblemente haya acabado con su vida terrenal. Los detalles del crimen son los siguientes: la noche del 22, M.N Sheila, que vivía sola, toma su acostumbrada ducha ligera de las 21 horas, se coloca la bata y va a su habitación. Se acuesta mirando el techo y alguien irrumpe en su habitación y la estrangula con una media de mujer que luego es encontrada atada alrededor de su cuello. Antes de ducharse, recibió dos llamadas telefónicas, una de su amiga I.V.m, y otra de un hombre del que no se sabe absolutamente nada. Es cierto que al asesino no le faltó imaginación, antes de ahorcarla con la media, hay evidencia que demuestra que le dio sedante para caballos.

Capitulo II
La prisionera

En la cárcel de mujeres duerme todos los días d.V.m de isabel. Es sometida a humillaciones por parte de las otras cautivas y las guardias del pabellón. Se le ha prohibido recibir visitas. Se aferra a sus pensamientos profundos con asiduidad. No es fácil para ella, y si alguien le preguntara diría que está acostumbrada, que no hay mas explicación que la propia realidad. d.V.m no pudo haber matado a M.N Sheila, porque esa noche disfrutaba la prisión. Ambas se conocían. Cuando d.V.m se enteró lo ocurrido derramó la lágrima que hace tiempo no hacía. Ellas pasaron horas juntas hablando cursilerías, podemos decir que veían la vida del mismo modo, y lo que abrió el surco entre ella y su amiga, terminó siendo la vida que ambas llevaban. Inculpada por delitos menores y delitos graves d.V.m cuenta los días que le quedan en prisión mientras intenta auto-encerrarse en su mundo de fábulas. En una hoja, a modo de distracción, anotó en su diario: "He notado que el retraimiento es producto de la distracción, y no a la inversa". También anotó con letra torcida:

Apenas llegué, fui a bañarme y mientras me duchaba, la Vero como le dicen las otras, una golfa del comisario, comenzó a fastidiarme, me empujó, y me dio un golpe de puño en la cara, seguido a eso, me tiró al suelo y me dio una patada en las costillas, las otras se reían y no se metían hasta que la Vero dijo: chicas vamos a divertirnos con la perra, y las otras comenzaron a escupirme y me dieron patadas también en las costillas, en la nariz, y en la cabeza, yo no podía hacer nada, me largué a llorar y les suplique que pararan porque me hacían daño. La Vero me dio una patada en la boca, mis labios sangraban, llegó la moho, que es una guardia gruñona y se dispersaron. Les ordenó que salieran, y cuando se fueron, me vio llorando y me dijo: ¿Por que lloras mujer estúpida? ¿Te gusta llorar? Claro que no, le dije. A que las has provocado eh, estoy segura que si. me dijo. No, le dije, pero no me creyó y me mandó a una pequeña habitación donde me dejo encerrada a oscuras. Allí pasé unos días cuando me sacaron casi muerta, porque no me dieron nada de comer ni beber esos días en los que estuve recluida.

Mientras,... en la ciudad...

I.V.M conoce a d.V.M, a quien hace tiempo que no ve, y espera su pronta salida. Ambas mantuvieron un idilio que duró un año y nueve meses y aun hay un sentimiento que las une. d.V.M no debería estar presa, según ella dice, pero fue condenada. En cambio I.V.M, si debería estar presa por que cometió mas delitos, algunos mas graves que otros, como robar a mano armada una tienda. El 21 de diciembre de 2006 mientras la policía buscaba y posteriormente allanaba la casa de su amiga, ella se bronceaba en la playa, cuando sabía que su amiga podía delatarla, lo mas tranquila se fue de vacaciones, cuando volvió se enteró que d.V.M nunca la delató, se hizo cargo ella, creyendo que podría salir bajo fianza. ¿Ella estaba implicada? Ella se hizo de algún dinerillo, lamentablemente nadie le concedió libertad bajo fianza, sino a cumplir condena de 5 años de cárcel y trabajos comunitarios a la sociedad. Cómo fue sometida a mucho maltrato y se portó dignamente, el juez aceptó disminuir la condena a un año de cárcel y debiendo cumplir, obligatoriamente, trabajos comunitarios en la sociedad. El encuentro con su amiga no tardó en llegar.
I.V.M se paró frente a la cárcel. Alegres como nunca antes, ambas se abrazaron.
-¿Cómo la pasaste estos días?
-Vaya broma, de pesadilla, no me lo olvidaré nunca.
-¿Y ahora que estás libre que es lo primero que harás?
-¡Matarte!
-Jaja, era sólo una broma...
-¿Sabías que murió M.N Sheila?
- No ¿Que pasó?
-La encontraron muerta con una media de mujer alrededor de su cuello.
-Uhmm, podría sospechar de mi...
-¿Cómo?
-Yo hablé por teléfono con ella, y estuve en su casa
-¿En serio?
-Y tengo algo suyo
-¿Robaste en su casa?
-¡No! Ella me prestó un libro, su teléfono, y además tengo su anillo.
-¡Estas implicada! ¡Volverán a encerrarte!
-Pero yo no la maté
-Tu le robaste
-Yo no la maté.
-Mira es mejor que nos separemos
-Recuerda que fui presa por tu culpa, así que ahora me harás el favor de quedarte conmigo, y...
-¿Que quieres que ahora vaya presa yo?
-Yo no dije eso, pero si tu quieres.
-¡Me has dicho que no la mataste!
-No, pero podría ir presa, y si es así tu irás presa.


Transcurrieron dos semanas sin novedad, la investigación se había estancado en su punto culmine. Mas de diez sospechosos, y, escasas pruebas. Se realizaron nuevos estudios al cuerpo de la víctima. M.N Sheila, mujer caucásica de 40 años, pelo castaño, ojos almendrados, labios finos, peso liviano, pierna derecha y brazo izquierdo fracturados, y se encontró una nueva prueba: un diamante. El diamante se hallaba en su garganta. ¿Se lo quiso tragar o quien la asesinó se lo hizo tragar? Todo se complicaba aún mas. La policía revisó en los antecedentes de d.V.m y ella ya había ido presa por robo a mano armada, precisamente de diamantes. ¿ Y como se relaciona d.V.m con la víctima ? Se conocían por supuesto, y se descubrió que además de la llamada, estuvo en su casa antes del crimen, la evidencia son las huellas que se acaban de encontrar en el picaporte de la puerta y en el timbre, pertenecen a d.V.M, no cabe duda.
La policía, fue a la casa de su prima para saber si sabía su paradero, y efectivamente, d.V.m se comunicó con ella al salir de prisión, diciéndole que alquilaba una pieza en la calle Eliseos al 1000. Cuando la policía llegó la encontró durmiendo, sin despertarla, la esposaron y la llevaron al auto entre dos oficiales. Cuando se despertó en la celda, pegó un grito exclamando ¡soy inocente! Los policías les hicieron algunas preguntas, uno se atrevió a abofetearla, sin embargo, llegó el abogado y d.V.m rectificó su inocencia. El sargento primero Perez, revisaba sus documentos cuando se dio cuenta que ella no era D.V.M, sino I.V.M, o sea: ¡su hermana gemela! La policía el dato lo sabía, pero como son muy parecidas físicamente cayeron en la confusión, entonces para remendar su error, la soltaron, y fueron a buscar a la verdadera d.V.m, quien ahora está otra vez presa con muchos años sobre sus espaldas y si sale saldrá de prisión cuando sea muy vieja.
Lo que la policía no sabe es que la asesina es I.V.M, no su hermana, que ahora está nuevamente presa cuando es inocente del asesinato, y su hermana tampoco sabe que I.V.M cometió el crimen. ¿Ella es la asesina? O tal vez no, es muy posible que M.n Sheila se suicidara, pero a mi la bonita de I.V.M me confesó que ella la mató, y no lo tomé muy en serio. Y la mató no para robarle, sino porque eran amantes, y encontró a Sheila con otra mujer en pleno acto sexual. Pero yo conocía a Sheila y se sentía depresiva, ella me dijo que planeaba matarse. Ahora yo estoy teniendo un romance con I.V.M, mientras su hermana D.V.M está presa, también conozco a D.V.M, admito que hace mucho no la veo, y no creo que quiera matarme si se entera, aunque no lo se, porque está en prisión.

Escrito por: el esposo de D.V.M