se despertó con una lágrima, fresca en la mejilla,
se sorprendio y se emocionó de sí misma, descubrió que amaba a lo que quería, y que moría por lo que amaba, comenzó a prestar suma atención a cada pequeñéz que antes ignoraba, ignorando que lo hacía.
salió y besó a cada árbol de su cuadra, en pantúflas, fué a la casa de su chico, y le dijo que lo amaba con locura, pero que ya no podía estar con el, y con nadie, pues era muy libre como para llevar una relación, para entender lo que esta significa.
nadie la comprendió, ella no tenía nada que comprender, todo iba más allá de sociedades, la naturaleza le hablaba claramente, y se entendían como cuando uno se habla a si mismo, semejante claridad en su cerebro depejado de materializmo, su mente le hablaba en subliminal del mañana, del ayer, de cosas que creía no haber vivido, que el cuerpo es la mala memoria del alma, que su alma desbordaba a todo cuerpo, que los grandes cambios y finales llegan cuando uno ni siquiera advierte que no está pensando en ellos. |