En el censillo instante de mi existencia me encuentro enredada,
Como hoja de blanco árbol que cae sin rumbo,
Un día preciso para descansar y descomponer lo andado
Y salir corriendo de fuera hacia adentro… demasiado lento.
Consigo a veces segundos, descansos ininterrumpidos
Cristales de amor que solo reflejan mi falta del mismo elemento,
Constante mirada inquieta que domina mis pupilas
De tormento y canciones, de esperanzas ya dormidas.
Que triste es mi risa que llorar no puede,
Que extraño es mi llanto que de reír se muere… se detiene.
En un momento de nada, hago nada, como nada, respiro nada.
Conmigo lo anterior al pasado y desvestido un futuro apagado,
No se quedan los sueños, escapo yo misma por la ventana,
Y un deseo que no entiende esta escena, me quiere y me abraza.
Recaen en mi espalda las flores que no recibí, los besos, las alas,
Para salir corriendo y no verte, para esconderme en silencio,
Para entrar de golpe por tus sienes y conocer en tus adentros,
La magia oscura de tu querer, lo congelado del sufrimiento.
CAST - 2007 |