Solo una mirada... cuando por primera vez a los ojos yo te vi. Desde lo profundo, la tibieza de tu alma pude sentir desde aquel momento en mi corazón se libero una nueva emoción que de pronto lo invadió sin decir palabra alguna, ya que no fue necesario mi corazón respaldado por mi alma una decisión había tomado que en cualquier situación o momento, que mi ayuda necesitaras sino es en persona, será mi alma que acudirá a tu llamada. por eso hoy te digo con toda mi sinceridad, que si un día en mi corazón tu presencia no esta los sueños de un día en tus brazos despertar solo en una triste mirada, la ilusión acabara.
Texto agregado el 27-12-2007, y leído por 111 visitantes. (3 votos)