Alguna vez pediste a la luna algún deseo, de puntillas junto al frío en tu ventana, juntando así tus puños como quien le hablase al mar, al mar...
Alguna vez, desesperada corriste envuelta en llanto hacia tu cama y el cristal de tus sollozos quebrantó lo que aún quedaba de mi cordura, tontita enamorada...
Alguna vez diste un abrazo y entregaste una sonrisa que desease buenas noches al más fiel de tus coqnuistas y al azar bajo la luna sin querer lo besarías, tú, aventurera...
Alguna vez te vi de lejos lamentando no tenerte entre mis sábanas al compás de un blues sincero, paseándome indecente por tus Champs Elysees, y así te ibas, allá, con él, allá...
Y alguna vez volviste a verme y supe de tu vida y supiste de mis pasos y juntos caminamos de San Telmo a la gris Gran Vía, y así fuimos pseudo amantes de la luna y vino tinto que juntó tu mano a la mía y en tus ojos tan perdidos como Praga endulzada aposté mis dementes líneas y tus labios en secreto le hablaron a mi alma...

...y fue esa noche, bajo la luna en La Habana, que pediste una canción...


...Voilá!!!