No puedo huir del dolor
Que me produce tu recuerdo,
Escucho las campanas tocar
Y pienso en tu rostro, en tu figura
El mensaje silencioso del repiqueteo
Vibra en mi interior, y me llama
Soy conducido por senderos secretos
A destinos invisibles, inalcanzables
En todas partes estás tú, sin forma
Sin color, sin mirada, sin espíritu
¿Quién eres, qué eres? ¿Qué quieres?
Quisiera creer que volveré a verte,
Que estarás esperándome en algún lugar,
Que en realidad nunca me dejaste
Pero entiendo que ya no estás aquí, y lloro
Dios observa mis lágrimas, y se ríe
Porque sabe que existen dolores más grandes
¿Qué es el dolor humano, qué es lo que siento?
Busco la respuesta, busco sin llegar a nada
Me aflige mi ignorancia, y vuelvo a buscar
Finalmente, cuando mis ojos no pueden más
Sólo me queda escuchar el sonido del silencio
Y sentir, en su infinita profundidad, tu ausencia.