Por la luz que ilumina todo, un duende de verdad
se ha desprendido de un grupo de otros duendes,
que vienen como tropilla por el continente cada año para estar presentes en la navidad de las diferentes ciudades,
y ahora esta perdido en este bosque desconocido,
de la selva colombiana,
quedando el pobre, esperando desorientado, iluso,
e impotente.
Cintia Bermudez consiguio un permiso especial,
de tipo tregua, para realisar un documental acerca de los rehenes que estan alli capturados,
para de paso hacer un aporte positivo a tan severa problematica, y ver de que manera pacifica cada uno puede volver a su sitio lo mas pronto posible.
Pero resulto ser que Cintia diviso al duencito, sentado en la hierba, con el sol asomando de la malesa a sus espaldas, acudiendo de inmediato en su ayuda. El ñomo, con sus orejas enebradas en el sombrero, se arrojo en su brazos y lloro largo rato.
Vale aclarar que por supuesto ambos quedaron virtualmente detenidos, y las condiciones de libertad cambiaron radicalmente;
pero el duendecito con su ternura,
de inmediato entro de lleno en el corazon de los guerrilleros, acaparando la atencion total de los habitantes del bosque, incluido los monos titis que tambien se agolpaban para conocerlo de cerca.
Pero como ademas Cintia transmitia en directo desde su celular, el mundo entero termino por saber de el.
-Yo calculo, dijo el duendecito,
que me he perdido por expresa voluntad de mi padre, pues el desea estar presente en cada aniversario del nacimiento de su hijo jesus,
en cualquier rincon del mundo donde sea que haiga gente.