La vida camina silenciosa en una noche fría,
junto con mis pies.
Se pierde entre las grietas de duras veredas,
se esconde de no sé quién,
se escapa de mi vista.
El viento tal vez la alcance
La vida se puso mis zapatillas
y pisa con inseguridad el camino
Como que tambalea
y yo la observo de cierta distancia
ni muy lejos ni muy cerca
Su paso es ligero
Me ignora
Algo quise decirle
pero no me atreví
La vida camina silenciosa
no dejando rastro de su paso
siempre mirando al frente
más protagonista que testigo
Por poco pensaría que soy yo quien camino
pero no puede ser
porque hace mucho tiempo
estoy sentado en el mismo lugar
esperando que ella me salude
Texto agregado el 24-12-2007, y leído por 141
visitantes. (6 votos)
Lectores Opinan
29-01-2008
muy bueno, urbano y desolado.un cuadro casi cotidiano... remi_dee
25-12-2007
suena familiar todo lo leído, al parecer somos varios los que esperamos a la orilla del camino. dendritta
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