Yo crecí, como suele crecer todo niño,
Viendo las dificultades que pasan con los mayores,
Y aunque tenía repartido mi cariño,
A solas, sufría crueles dolores.
Y es que, en ese entonces no comprendía
Porque peleaba papá y mamá,
Yo veía que siempre discutían,
Por cosas que parecían no importar.
Recuerdo bien, esa tarde,
Creo que nunca la voy a olvidar,
Pues yo miré a mi padre,
Con alguien que no es mi mamá.
Me sentí decepcionado,
Como que no lo quería creer,
El ser que había idolatrado,
Hoy acababa de caer...
Quise regresar y comprobar lo que vi,
Porque yo decía , no, no es cierto,
Ese no es papá, parece que me confundí,
O así yo quise creerlo.
Caminé con paso incierto,
Buscaba calmar mi llanto,
Y de verdad lo que cuento,
Me dolió no se cuanto.
Confundido me sentía,
Con odio o con tristeza,
De aquello que yo sentía,
Daba vueltas mi cabeza.
No podía yo creer,
Como se puede engañar,
A una hermosa mujer,
Tan buena como mamá.
Mi corazón se partía,
No quería un engaño así,
Y en mi mente no cabía,
Porque mamá tenía que sufrir.
Que crueldad tiene la vida,
Cuanto se llega al engaño,
Y no se cura la herida,
Pues es demasiado el daño.
Ya no existe la confianza,
Ya ni siquiera hay amor,
Y ninguna esperanza,
De que se cure el dolor.Y aunque todo esto está mal,
El engañar a la esposa,
Te quiero decir esta cosa,
La sociedad lo ve muy normal.
Al hombre esto le aplauden
Y hasta el gusto le alaban,
Y si fuera una mujer,La sociedad es machista
Nadie lo puede negar,
Y a veces se nos olvida,
Que también tenemos mamá.
Yo imaginaba a mamá,
Si es que llegara a saber,
Llorando por su dignidad
Y calidad de mujer.Y si ella lo supiera,
Mejor quisiera morir,
Porque sé que ella de pena,
También tendría que sufrir.
Papito, por favor recapacita,
Deja ya a esa mujer,
Pues mi linda madrecita,
Eso no ha de merecer.
Para mi gran amigo Beto.
Con la pura lengua la acaban.
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