triangulos
Comunicado oficial numero 1:
Sres. críticos, fans, amigos y amigas, enemigos y enemigas, civiles y demás, procedo a informar lo siguiente:
Voy a ejecutar la más gloriosa de mis obras y requiero de su presencia pues será inaugurada, ni bien la finalice, en una paqueta velada en mi hogar.
Comunicado oficial numero 2:
A los efectos de presenciar una nueva y particular concepción del arte os ruego venir vestido de la manera más incivilizada y provocadora posible a fin de poder quedar a tono con lo expuesto en mi futuro opus.
Comunicado oficial numero 3:
Queda inaugurado, el proceso de reorganización artística
Muchas gracias.
(Escrito encontrado en la mesa de un bar de Palermo, muñido de 1 tarjeta a modo de invitación.
Obran varias copias en poder de un selecto número de testigos)
Tengo aun algunos minutos;
pues ahorita pasan a buscarme.
Aun puedo ver mas acá y puedo así recordar por quien doblan las campanas de mi altar.
Blanca, aun más, yaces ahí detrás.
Juntos vamos a partir cuando ella a de llegar.
Cuando los dos triángulos se hayan encontrado,
alguien quiera que algo bueno haya comenzado.
Solitario y blanco, puro y minimalista, el loft de la calle Fitz-Roy es escenario y testigo de un crimen.
Tras la puerta del piso 2, estaban los despojos de una prometedora carrera artística.
Hay un espejo cuidadosamente dispuesto en el amplio y diáfano domicilio de Mikael quien yace en su cómodo y blanco sofá.
Ahora rojo y aun húmedo.
El filo de sus ojos miraban a si mismo, como queriendo hallar no mas que preguntas. Para que atormentarse con respuestas en este majestuoso final! Pensaba en la víspera de su partida Mikael.
Con lo que queda de sus esfuerzos murmuro:
Me gusta beber de tu agonía
Puedo ver mas alla del cristal de mi copa
las mil imágenes de tu derrota.
Tus ojos brillan
Devuelven con malicia mi mirada
…y tu cara ya dejo de expresar.
Mikael era un pintor frustrado por su creciente éxito, todo el ambiente artístico sabía que lo aguardaba nada más que la fama y el estrellato.
Sin embargo, el se veía como el relleno de un sándwich podrido entre sus alocados fans y la crítica. Ambos extremos que debían funcionar como una dialéctica que lo enriquezca y lo mantenga en equilibrio no hacían mas que destrozar su, para el, maldita existencia.
Y en esa tarde calurosa de febrero, decide quitarse la vida: su última gran obra, la decisiva.
Dividido entre su anhelo por el éxito y su odio hacia todo ser vivo y en un rapto de locuaz e inusitada algarabía, decide intervenir de la manera mas extrema en su propio cuerpo y en el de su amada.
Quiso dar un paso mas allá por lo que decide intervenir en su propio cuerpo, el de su amada y conformar ambos una instalación que Mikael dignó en llamar “intervención de atmósfera”.
Su odio hacia todo ser vivo era contrarestado por su amor a lo inanimado (lo eterno decía el) amaba sus cuadros sus libros y por sobre todo, su casa.
El quería intervenir en el alma de la casa, su hogar, en su ser y todo lo que lo rodea, quería sentirse asíntota y ser así, eterno. Era la mejor manera de aniquilar ese hilo de esperanza que rodeaba su fluir diario, quería burlarse de sus instantes de alegría (alergia decía Mikael).
Al respecto de su alergia:
-che! que contento estas hoy que te pasa? le decía al pasar un colega suyo a lo que impúdicamente Mikael respondía -alergía tengo, una maldita y molesta alergia.
Su obra final sería un perfecto canto a la vida, transformándose en eternidad y exponiendo así lo vacuo de vivir. Mostrarse vivo y feliz desde su ausencia/presencia.
Los flashes de los fotógrafos forenses y el ir y venir de los detectives, era entorpecido por la presencia inoportuna de los críticos de arte inmiscuidos valla a saber como en la escena del crimen, un par de locas fans amenaza con suicidarse si no las dejaban entrar; los críticos estaban extasiados ante la majestuosidad de la obra y a pesar de su inoportuna presencia, un policía les encontró cierto grado de utilidad y les propuso vigilar que nada sea movido mientras dure la investigación.
Unos minutos mas tarde una horda de excitados/as fans acude puntualmente a la cita. La exposición ya comenzó y Mikael sonríe socarronamente desde su sofá.
AZM
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