Una foto de un Gato que camina cauteloso tras un pequeño ratón, un playmobil atrapado por la presa de un clip, y un gusano de plástico azul que se pierde entre un montón de papeles al son de la cuerda que lo arrastra,

Mi mesa, mi mente, mi mundo.

15 minutos de tranquilidad, espaciada, dilatada por la lentitud de un ordenador que esta siendo rastreado por un antivirus que no encuentra su presa, mientras una silla me atrapa 8 horas perdidas entre papeles.

Mi mesa, mi mente, mi vida.

El gusano de plástico azul cae tras chocar con un bote de vitaminas verde que refuerza mi cuerda, mi vida. Levanto mi cabeza que sigue pegada a un cuerpo aletargado por una comida reciente, el gato no llega jamás al ratón y el antivirus deja una nota en la mesita, celoso de que no llegue a su cita el virus perdido.

Mi mesa, mi mente, mi locura.

Toc-Toc, suena la puerta, alguien quiere entrar, romper la burbuja, 15 minutos, 900 segundos, uno, dos, tres, ...
Tal como empieza comienza a acabar,
Como una vida, como un cigarrillo, como una carta que nunca llega.

Mi mesa, mi mente, mi espacio.

Limitando los movimientos del playmobil, limitando la cuerda del pobre gusano azul que sigue renqueante sin avanzar,
Caminos iguales, repetitivos, fotos demasiado vistas y la cuerda del gusano azul no cesa y el pobre gato jamás llegará al ratón.