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Eran la seis de la mañana y ya se sentía el tráfago de la gente en las arterias de la urbe. Todos apresurados a sus labores diarias.

Joe Blanco, salió de su habitación de descanso en el piso de solteros, dirigiéndose a la estación policial donde trabajaba. Había perdido la memoria desde cuando estaba en el cuerpo.
Se dijo – Parece que nací con el uniforme de patrullero puesto. De ahí mi apellido.
Eso sí, siempre había cumplido su deber, a cabalidad y las cicatrices en su cuerpo así lo demostraban.

Llegando a la puerta con su uniforme impecablemente limpio, saludó al compañero que estaba de guardia – Hola Jhonny - ¿llegaron los demás? El guardia hizo un ademán , diciendo – Sí, y el capitán esta echando chispas – Joe, preocupado dijo algo inteligible y entró.

En el gimnasio de la unidad, estaba el capitán frente a una pizarra llena de jeroglíficos y luces destellantes. Con un puntero, iba detallando la jerigonza escrita. Viendo a Joe, le dijo – Es tarde, pase y preste atención. Dirigiéndose a los reunidos, continuó – Es un ataque artero y sin aviso, el que han efectuado agentes externos. Los males causados son cuantiosos – Y repitiendo varias veces esa frase, terminó con una expresión de preocupación – Es cuantioso y horrible.

Agregó – Tenemos rodeado un perímetro amplio; felizmente las primeras fuerzas que hemos enviado, pudieron contenerlos, pero a un costo muy grande y lamentable.

Capitán dijo uno - ¿Se puede saber a que costo en vidas? El oficial bajo la mirada, se tocó la frente y dijo – Son muchos los muertos. Tanto de ellos como nuestros.
Insistieron varios entre ellos Joe – Capitán, díganos cuantos de los nuestros; queremos saberlo. Tenemos muchos amigos en el cuerpo. El capitán volviéndose a la pizarra fue señalando y dijo – Todo comenzó en el alto, donde lamentablemente descuidamos los pasos y controles; cuando recibimos la alarma ya habían atacado el sector alto y medio de la población. En las seis horas siguientes del ataque han muerto cuatro mil de los nuestros.

Un murmullo de pena y congoja se escuchó entre los presentes, convirtiéndose en espanto y rabia – hay que matar a esos salvajes.

El oficial los fue nombrando por escuadras y distribuyéndolos por el “Plan Cuadrante”, tocándole a Joe, las arterias y vías mal iluminadas. Marchaban con silencioso sigilo y con las armas listas; gases paralizantes, redes y un hambre de venganza. Sí, eso era. Una tremenda hambre.

A la vuelta de un recodo, la avanzada se encontró con el enemigo, que venía premunido de armas de gran poder de fuego, aumentando la temperatura ambiental , haciendo irrespirable el sitio por el olor a muerte.
El sector enemigo estaba oscuro y rojizo, pestilente por el hacinamiento de los cuerpos de tantos combatientes, destacándose los policías muertos.

Un solo grito salió de Joe y sus compañeros – Vamos. Vamos. Ataquemos, tenemos que contener esta invasión o nosotros y el cuerpo estaremos perdidos irremediablemente y será nuestro fin.
Saliendo de la oscuridad, atacaron . Los primeros murieron de inmediato ante las armas foráneas . Joe y los demás sobrevivientes mostrando su valentía se tiraron al montón repeliendo el ataque.

Así, ahítos de enemigos, fueron avanzando hasta que limpiaron su sector.

De los quince que habían sido en su escuadra; solo Joe y dos más se habían salvado. El resto se hallaba amontonados muertos con sus uniformes blancos. Siguieron patrullando, viendo con alborozo como triunfaban en los en los diferentes lugares.

“Victoria. Victoria, hemos ganado esta batalla”
Volviendo a su unidad donde el capitán los felicitó diciendo – Si bien es cierto, la victoria fue nuestra, hemos pagado un costo inmenso en vidas de policías . Pero todo lo hemos hecho por el cuerpo. Solo por el cuerpo – Vayan a descansar, se lo merecen.
Mañana será otro día.
Y diciendo eso los despachó a sus lugares de descanso.

Joe Blanco, muy cansado, se fue arrastrando, moviendo los tentáculos de su rollizo cuerpo, sin forma definida, ya que era UN LEUCOCITO. El vulgo les decía GLOBULO BLANCO O PUS.

FIN

Nomade....¿Los sorprendí?.....




Texto agregado el 16-12-2007, y leído por 27292 visitantes. (7 votos)


Lectores Opinan
29-12-2008 Jajaja... que gran sorpresa pero muy bien lograda, la narrativa excelente muchas felicitaciones, me ha gustado mucho. le dejo sus estrellitas. liruviel
18-12-2007 ja, ja, ¡Claro que nos sorprendiste! ¡Muy ingenioso! Ja, ja. Me gustó. Sofiama
17-12-2007 ¡me gusta me gusta me gusta! sí, me sorprendiste :) wenceslaowenceslao
17-12-2007 Sí, me sorprendiste. Por la sorpresa y porque me resultó entretenido, ***** PeggyMen
16-12-2007 Dura batalla diaria, poco apreciada. Me gustó. sereira
16-12-2007 Si!!!! me has sorprendido!!! excelente hasta lástima me dió de los pobrecitos muertos en batalla. beshos y********Matilde...sobreviviente...jajajajajjajaj mancuspia
 
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