Amor, mis relatos tienen más alagos que críticas.
Lo lamentable de ello es que han hecho crecer mi ego.
No quiero olvidarte a ti, mi objetivo,
si escribo lo hago por ti, para ti,
porque tú me inspitras.
Es esta una queja a aquella vil parte de mí
que comienza a tomar vida,
dándose ella los tributos
aun cuando la belleza de mis palabras
es nada más que la belleza que veo en ti.
Esta es una queja ¡Sí señor!
y si de críticas llenan estas letras,
servirá de muerte a mi ego
y de nueva vida a mi amor.
Texto agregado el 13-12-2007, y leído por 156
visitantes. (4 votos)