Inicio / Cuenteros Locales / coronel / El prisionero del boicot
Las tardes han pasado largas,
demorándose un siglo cada dia en caer el sol
sobre mi ciudad derrumbada de nostalgias....
te fuiste apenas el espiral comenzaba a detenerse,
sin dar tiempo a un mínimo disfrute.
Ahora echo de menos tu piel suave y el calor de tus
abrazos.
Sobresaltado, porque me corroe el querer estar con
quien está más allá de lo evidente, oculto en el
descanso de los que han terminado.
Pero yo, me voy apagando de tristeza cada día
que no estás aquí.
Pero por eso los días solo duran un día,
para odiarlos o amarlos durante 24 horas
puntualísimas.
Suerte fue que la vorágine me privo de seguir con
la melancolía, porque sino habría estado bajo tierra
hace ya rato.
Ahora, cuando ya regresas, me pone ansioso tu
olor recordado con ganas animales.
Así espero comportarme cuando vuelvas, con el
instinto del tiempo y la distancia pegado nuestra
piel, no dando tregua al desenfreno de nuestra
unión postergada por todo el universo que tiende a
interponerse entre las voluntades...pero cuando son
de fierro prevalecen sobre la miseria y la malicia.
Voy a sabotear el sabotaje disfrutando cada
milímetro de tu regreso junto a mi, para endulzar
mi espíritu de felino que ha aguardado la vida entera
a su sombra en los placeres, llenándola de luz,
como un perfecto y renovado Sol.
El Coronel |
Texto agregado el 11-12-2007, y leído por 99
visitantes. (0 votos)
Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login
|