Aunque me quede un vacío,
que nunca podré llenar,
ese hueco hondo y profundo,
lo vestiré de recuerdos
y cada noche en mis sueños,
elegiré uno distinto.
Recordaré tu ternura,
el amor que me entregaste,
aunque tú nunca quisiste,
reconocer que fue así.
Buscaré con mi mirada,
aquel rincón de mi casa,
que tantas y tantas noches,
cobijó tu cuerpo amado.
Hablaré a solas contigo,
te contaré mis pesares,
aunque tu voz esté ausente,
seguiré tus directivas.
Y alguna vez, algún día,
nos volveremos a ver,
y todo resurgirá
En el minuto de verte,
volverás a ser presente,
y otra vez tú me amarás.
|