"Cayó en mi ventana un tal Francisco de color celeste. Venía de parte del vecino sordo.
Seguí pasando el plumero, mientras el tipo gritaba para que le corriera el vidrio. No dejé entrar al desconocido aunque supiera volar del el 9 al 14...saltar como un mono celeste sobre los malvones....
Tuve miedo de enamorarme..."
Texto agregado el 05-12-2007, y leído por 167
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Lectores Opinan
01-02-2008
¡Lo bien que hiciste! Para enamoprarse bien que sea a orillas del río y en patas, sin vidrios ni alambradas, no disfrazada de señora que limpia. sonialt
16-12-2007
Hay que prudencia y cierto temor con los vecinos, pero mucho más con lo que puede llegar a hacer uno mismo. NeweN