Proverbio 17 para los cuentos.net
Albert Einstein, físico alemán, (1879-1955), en 1921 recibió el premio Nobel de Física.
Dos cosas son infinitas- el Universo y la estupidez humana.
Sobre el Universo no se gran cosa ya que no soy físico, pero si puedo asegurar que la estupidez humana es infinita. Desde el comienzo de la humanidad como sabemos de la historia, el ser humano se ha aniquilado. Primero con piedras, luego garrotes, pasando por cada vez más a armas sofisticadas. Ahora llegamos a un punto en donde con apretar solamente un botón se hace volar edificios, coches, y muy pronto volaremos todos por los aires.
Nada pero realmente nada ha aprendido el ser humano de las tragedias de la historia. Nada ha aprendido de las guerras, holocaustos, y destrucciones que asolaron y siguen asolando la tierra. No ha aprendido que la violencia engendra más violencia, no ha aprendido que mata y muere por los delirios de grandeza del poder que está en las manos de unos pocos, que mueven como títeres a los muchos. No ha aprendido que los políticos mienten, sobornan se dejan sobornar, son corruptos en más o menos grado. Que todos los políticos prometen el azul del cielo antes de los comicios, y una vez en el poder sufren de amnesia total. No ha aprendido que su vecino, sea cual sea ese, ya sea en su calle o en otro país, o en otro continente, tiene el mismo derecho que él de enarbolar la bandera de su preferencia, y no por que no coincide con la suya hay que quemarla o matarlo. No ha aprendido que la muerte viene sola cuando llegó el final de su vida, que no hay que buscarla dejándose matar. No ha aprendido que los muertos se han perdido para siempre, que por más que se los llore no retornan, y que una vida es preciosa y que hay que defenderla con paz y no con violencia. El ser humano es tan estúpido que es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra. ¿Que digo dos veces? Ha tropezado y seguirá tropezando hasta que no queden más piedras o humanos en la tierra.
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