Persiguen mis pupilas
la abismal escarpa del ensueño,
el compás sonoro de tu andar
disloca mi aparente calma.
Se aproxima sigilosa la maldita compañía,
trayendo consigo temores ocultos.
Sucumben los acordes resonantes
en fuga presurosa...
Resguardada en la prisión
de mis anhelos,
se halla la sosegada
esencia de este verso,pujante,
enérgico y al mismo tiempo,
endeble e incierto.
Flavia.
Texto agregado el 28-11-2007, y leído por 79
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Lectores Opinan
28-11-2007
Unas veces pujante y enérgico, otras endeble y flácido. Así es la vida.
ergo, autocensurado ergozsoft
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