Introducción:

Son los mismos personajes que en el anterior cuento, este breve cuento trata de que mientras pasaban las navidades en una casa alquilada, surge el momento de que tres personajes cuentan los problemas que tuvieron durante su infancia.
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Estando todas las parejas juntas,-por si no recordáis, estas eran las parejas: Erika y Mark, Vicky y Aitor, Laura y Leti, Paula y Alex, Jenny y Miriam, Maribel y Carla, María y Joan, excepto Samuel que seguía soltero-; pasando las navidades en una casa campo que alquilaron entre todos, la cual era muy acogedora, tenia su salón con una chimenea, un baño, y la cocina, y arriba estaban las habitaciones que todas eran iguales con dos camas normales cada una.
Llevando un par de días, en los cuales habían estado haciendo senderismo, pesca y otras muchas cosas.
Todo iba muy bien, pero Mark estaba preocupado por su novia, ya que llevaba un par de días en que por la noche saltaba, antes de bajar a desayunar le pregunto:
. ¿Te pasa algo Erika?- te lo pregunto por que llevas un par de noches que saltas en la cama, como si tuvieras pesadillas.
-Pues si, y creo que salto porque recuerdo como fue mi infancia a partir del colegio.
-Te vendría bien contármelo a mí y al resto de los amigos, para así desahogarte-
- Me lo pensaré- gracias por preocuparte dijo Erika dándole un beso
-Me preocupo por que te quiero-
-Ya lo sé-
Bajaron a desayunar, y fueron hacer lo de todos los días, senderismo, pescar, montar a caballo…
Ya por la tarde, sentados todos cerca de la chimenea, Erika les dijo:
- Necesito hablaros de cómo fue mi infancia, ya que llevo pasando unas noches muy malas-
Todos estaban de acuerdo el que lo contara y Mark se alegraba mucho del gran paso que iba a dar su novia ya que sabía muy bien que le resultaba muy difícil contarlo, empezó Erika a contar su infancia:

“Recuerdo a partir de cuando empecé a ir al colegio. Primero fui aun colegio de monjas, donde brevemente recuerdo, que solo aprendí a saltar, y que participé en la obra del colegio- no me acuerdo de que era la obra, solo que iba vestida de pastorcilla y toque la flauta. También me viene a la memoria –lo que ahora no se si fue real o no- que la gente de la clase me encerraron en un cuarto que había bajos las escaleras, cerca de la clase.
Cuando mis padres vieron que no había aprendido nada me cambiaron de cole, en cual pensaba que me iría mejor pero no fue así.
Empecé segundo de primaria, que pienso que aquí fue la profesora la que me empezó a cohibir, ya que un día en clase me dijo que saliera, yo salí, que cogiera el papel y lo quemara, yo al estar tan cohibida no lo hice, aparte que cuando era pequeña tenía miedo.
En este curso fue cuando me atropello un coche y cuando volví fui en ese día el centro de atención ya que me preguntaban al igual que cuando me operaron del ojo izquierdo.
Iban pasando los cursos y no les dije nada a mis padres, llegaba a casa, comía y me ponía a estudiar, para no pensar en lo que me pasaría al día siguiente, ya que los chicos me levantaban la falda –y por eso deje de ponérmela- y algunas chicas no hacían mas que acosarme con insultos y me pegaban, las otras pasaban.
Aparte de los del colegio, también las chicas del pueblo me rechazaban y no me dejaban juntarme con ellas y todo por ser tímida.
Llegue a coger miedo y no quería ir al colegio, fue cuando se enteraron mis padres y fueron hablar con los profesores y claro esto fue a peor.
Lo que no soporte es que cuando teníamos que hacer lo del amigo invisible me toco hacerle el regalo a una de las chicas que se metía conmigo.
El mejor momento fue cuando llego la graduación, eso si eche de menos a un par de profesores, entre ellos a mi profesora de ingles, los cuales me habían ayudado mucho.
Pensaba que me iba a ir mejor en el insti, pero tuve mala suerte por que la gente que se metía conmigo fue al mismo insti.
El primer año que fue 3º de ESO, estuvo bien, por que conocí a Nieves, la cual entonces fue mi mejor amiga y me ayudo mucho, pero finalmente dejo el curso. Este curso lo repetí dos veces más. También la poca compañía que tuve no fue la más apropiada ya que me hicieron el doble de daño.
Deje de estudiar y llevando un año y pico volví a otro insti y fue cuando te conocí a ti, Vicky y los demás.”

Cuando acabo de contarlo, todos estaban algo asombrados con la historia, asi que para quitar el silencio que se había producido, Vicky le dijo:
-Ya no vuelvas a preocuparte por eso, por que ahora a parte de tener amigos tienes a un novio que te quiere un montón-
- A mi me gustaría, si queréis, desahogarme contando lo que me paso cuando tenía 14 años- dijo Paula
-Claro que puedes contarnos lo que te paso- dijeron todos.
Asi que Paula dijo:
- Quiero dejar una cosa clara yo nunca he querido adelgazar si no todo lo contrajo, y empezó a contar su historia:

“Como he dicho antes, tenía 14 años, merendando tranquilamente, me atragante con una loncha de lomo, una cosa normal.
Pasando varios días, una mañana me levante - sin saber por que- no podía tragar, y se lo conté a mi madre, la cual me dijo que no dijera tonterías.
Asi que todo lo que desayunaba, comía, merendaba o cenaba, lo tiraba sin que mis padres se dieran cuenta.
Hasta que llegó un día, en que mi madre me pillo tirando al bather los restos de la comida.
Un día por la noche sin espéramelo, mi madre me puso un embudo a la fuerza para que me lo comiera todo.
A la mañana siguiente me levante y empecé a comerme la manzana, hasta que mi madre me dijo:
- Ya se te ha pasado la tontería de no poder tragar-
Volví con lo mismo, hasta que un día cenando mis padres me pegaron dos tortazos y poco a poco fui empezando a comer algo. Eso si adelgace 7kg, llegue a pesar 40kg, lo bueno es que a los dos meses se me paso todo.”

- Hoy es el DIA de las historias de la infancia- dijeron todos algo asombrados
- Pues a mi también me gustaría contar lo que llegué hacer por culpa del dichoso tabaco, es muy breve – dijo Samuel
Y todos le dieron paso para que lo contara y empezó:

“Empecé a fumar con 12 años, solo para no sentirme rechazado, y claro como no tenía dinero pues se lo empecé a coger a mis padres, al principio fue bien, pero eso de robar se acabo convirtiendo en una obsesión y fue a peor.
Mis padres se daban cuenta de que no estaba bien y claro finalmente me pillaron que yo les cojia el dinero y un día me siguieron y se enteraron de que fumaba.
Un DIA sin que yo supiera nada, me llevaron a un centro de ayuda, y debo reconocer que gracias a eso, deje ambas cosas de fumar y robar”.

- Que tarde se ha hecho, mejor no recordad la infancia y disfrutar de ahora y de estos días,- dijo Vicky
- Tienes razón, vamos a centrarnos y olvidarnos de cosas pasadas y a disfrutar de nuestras vacaciones.

FIN