Con la noche se rompe algo y de todo nadie acepta la culpa. Cuando caminan se miran de reojo a ver si alguien confiesa la falta, Todos tienen cara de malditos y se miran espantados, Hasta con los reflejos de la noche que se queda cuando ellos corren. Y así es a pesar mío y tal vez todo sea para mí a pesar mío. El mío de ti que tú te lavas de la ropa o arrojas al canasto con los demás, al mío de ti que se te vuelve confeti pegado a tus ropas, cuando sales de noche y miras de reojo a ver si soy yo el que confiesa los crímenes para perturbar la oscuridad donde nadie es culpable mientras no sea inocente. Sales de noche para dormir el día (eso dices), pero se yo que sales de noche a romperte la crisma, a hacer círculos, a comerte las uñas y andar en coche, sales de noche a pesar de todo, y muy a pesar tuyo que no aprecia ni el frio ni lo oculto, nada mas oculto que la noche donde te guardas mucho de no estar oculto de nadie.