Cansados ojos que se derriten
en negros ríos que toman su cauce,
en los surcos de un rostro marcado
por la pena y la gloria.
Vivo en el umbral de un laberinto
olvidado de rezos y rosarios,
de veladoras y santos,
cegados por la niebla consciente
de la santidad de las almas
y la perdición de los seres.
Y sigo postrado en este recinto
lleno de palabras huecas
e intenciones puras.
Texto agregado el 17-11-2007, y leído por 106
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Lectores Opinan
17-11-2007
buen uso de palabras y fraces muy bueno mis estrellas para ti ANJELA