Nunca antes me pregunte cuantas vueltas da el ventilador que ahora mismo gira sobre mi cabeza con ese sonido forzado y monótono que tienen todos los aparatos con motor eléctrico.
Es un sonido peculiar, como si estuviera meditando al revolucionar, algo como mmm o nnnn o mmmnnn.
Este ventilador no sopla lo suficiente nunca puede quitarme lo caliente, ni siquiera refrescarme un poco, pero estoy mas que seguro de que a cada vuelta de las aspas algo pasa sobre la faz de la tierra. Quizás en este mismo momento hay alguien que sin saberlo camina a encontrarse con su asesino, sin imaginarse siquiera que ya ha sido detectado y todo se ha puesto en movimiento para conjugar su final, es posible que ninguno de los dos sepa que se pertenecen uno al otro completamente, que su destino estaba ligado desde el principio del tiempo y que ellos sin saberlo solo están de paso en la tierra para cumplir el designio que contiene el fin de todos nosotros,
Hay una mujer que suena que se casa en una iglesia donde todos los convidados son santos pero el que oficia es un demonio, hay comerciales de televisión y en todos lados los malos se pelean con los buenos, no importa quién es quien porque los que ganan siempre son los buenos y los que cuentan la historia.
Tu y yo somos cómplices, tu cuando me lees y yo cuando te escribo.

Jorge P. Guillen