La Sociedad es una selva, urbana y rural, cada una con su idiosincrasia propia, regulada por mil y un mecanismos de carácter endógeno y exógeno.Pero a pesar de todo, es como una construcción de naipes, o de mondadientes donde milagrosamente permanecemos en equilibrio, y si de repente todo se va al carajo, aparecen esos personajes diminutos de los fraggel, que como autómatas recomponen los desperfectos.En realidad deseo referirme a la adaptabilidad al medio donde vivimos.Basil Bernstein, sociólogo y lingüista, creó la teoría de los códigos lingüisticos.Él habla de dos tipos de códigos, el código elaborado y el código restringido. Con base a ellos proyecta dos tipos de ciudadanos, un ciudadano que domina un solo código, el restringido, y que debido a él está imposibilitado para progresar, cambiar de estratos, generar relaciones fuera de su zona de desarrollo próximo, por el contrario aparece este otro sujeto, aquel que domina un código elaborado, es decir, es capaz de hablar y entenderse con un tipo del restringido, pero además puede relacionarse con un sujeto con dominio lingüístico muy desarrollado.Para Bernstein, el sujeto de código elaborado pertenece al grupo de dominación, al emergente que maniobra, moviliza y desmoviliza a la masa de carácter restringido.Estas teorías son como todas, teorías. Contienen mucha verdad, pero todos conocemos a algún ceporro que llegó a alto ejecutivo de...pero no me cuente un cuento de Jorge Bucay porque vomito.Todos sabemos que hemos de adaptarnos al grupo, el que realiza el mejor trabajo es aquel que tiene los mejores recursos, pero nada es perfecto. O en realidad todo es tan perfecto que el Estado está interesado en que existan grupos de inadaptados, la balanza debe estar equilibrada.Vean cualquier talk- show televisivo, en ellos salen esas marías barriobajeras, fustigadas por sus maridos alcohólicos, con sus deprimentes lenguajes al límite del border-line, pero los vemos, atraídos por sus historias, porque ellos son felices saliendo ahí, es su mundo, para ellos no es ridículo, no emergen y realizan una observación desde arriba, el mundo es así y punto ,y las medias de calcetín se llevan con falda y rodillas al aire.Los tontos, somos los que sufrimos viéndolo, pensando en su pobre diálogo, su falta de pudor...y ahora parece que se le da la vuelta a la tortilla, ¿ No será qué yo, que creo ser poseedor de un código elaborado, soy más infeliz por mi nivel de conciencia social?¿ No caigo en una especie de fascismo?¿ No autogenero actitudes de desprecio?Todos nos adaptamos, y nos quedamos en determinados rediles sociales, porque tenemos miedo a lo que no conocemos, a mezclarnos, a conocernos, a vivir en auténtica Comunidad.