Al nacer la aurora , al final del camino (un verdadero boceto del vaivén escurridizo de un verde universo donde desembocan las perplejas esperanzas), en las inmediaciones de Puerto Montt, hay un singular hostal en donde reina el orden y la limpieza unidos a cantos matutinos de una misterosa voz femenina que cada mañana repite la misma canción:
La,la, la
libertad...
un sueño de amor y realidad...
mmmmmmm...
la, la .la, la , la...
un muro secreto,
verde realidad...
túnica oscura
visita mi alma
cuando tú no estás...
Qué la impulsa a cantar; dónde guarda sus oníricas esperanzas; a qué teme cuando alza los ojos;es que acaso se viste de oro el amanecer para ella ;si desconoce la muerte , qué busca sin descanso;si para ella no existe el calendario que marca los días, cómo sueña con el futuro ; qué es la memoria para este ser indefenso frente a un tiempo ausente;cuándo se dibujará la sonrisa en sus pálidos labios, si desconoce la concresión del amor; a qué misterioso espacio pertenecen sus divagaciones ;si sus labios se humedecen, quién los saboreará para llenarlos de deseos o dulzuras , quién...
Sin embargo,al caer la noche , cuando todos duermen, la jovencita se transforma en una bella princesa , a quien los pasajeros pueden hablar e incluso danzar con ella , pero al aproximarse la media noche (en el momento en que la luna observa celosa ) sale corriendo del lugar ante la mirada perpleja de los presentes y el corazón expectante de aquel que sin quererlo la haya mirado a los ojos. Entonces la vorágine de sus emociones se enciende ,despiertan las ocultas pasiones de quienes se le aproximan y su perfume les transporta a una dimensión donde el instinto del carnaval predomina haciendo caer las máscaras y llevándolos tras sus deseos; el más osado correrá tras ella y tal vez la alcance con los ojos cerrados irá tras su olor , un perfume de jazmines , una promesa de placer ; la noche se cierra como una puerta indeleble y sólo queda el zapato olvidado porque el objeto del embrujo yace en el suelo con la mirada extraviada y una sonrisa demente que lo ha llevado a mejor vida, según dicta escrito en su lápida ,cual eufemismo cruel de lo que pudo haber sido. |