Mi señor estoy ante tí
como lo hago cada día,
no para pedir por mí,
sino por los que te olvidan.
También pido por mi familia,
por mi esposa e hijos,
por quien me critica
y por todos mis amigos.
Por el que está llorando
y por quien está enojado,
por quien está orando,
por el que te ha olvidado.
Pido que haya amistad,
sin importar fronteras,
que ya no haya maldad
en quellas trincheras.
Extiendo hoy mi mano
para brindar amor,
yo quiero ser Hermano
de todos gran Señor.
Te pido por el enfermo
que se consume en su cama,
por el que está muriendo
y ni así te llama.
Por el que no te conoce
o no sabe de tu amor,
por el que con su roce
no da más que dolor.
Por aquel niño hambriento
para que tenga pan,
por el que está sufriendo
y ansía libertad.
Por los niños sin padres
para que les des tus brazos,
por las pequeñas madres
para que guies sus pasos.
Por los que han blasfemado,
por los que me han odiado,
por que no te han buscado,
no los apartes de tu lado.
Por los que aún no nacen,
por los que hoy moriran,
permite que descansen,
al pie de tu altar.
Nunca me olvides; Dios
que por estar ocupado,
reconozco mi señor,
a veces te he olvidadp.
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