...No abras los ojos aun, no quiero que de tus bellos ojos brote un manantial de pena y amargura, no mires hacia atrás, que ya no vale la pena observar lo que quedó en ese lejano lugar olvidado...no apresures el paso que no hay prisa para llegar a aquel nuevo lugar, descansa, respira, grita, sonríe, pero no desistas...cubro tus ojos porque no quiero que se dañen con aquel vaho de mentiras y traiciones que nos persiguen...no quiero que tu corazón se irrite y se desangre de tanto luchar en contra de aquellas piedras que no nos dejan pasar, pero tampoco cierres tu corazón a los aromas de aquellas flores que te esperan en aquel jardín que ilumina con sus diversos colores hasta los días más opacos y hostiles...sé que tienes ganas de llorar, sé que tienes el corazón apuñalado de rabias y temores que atan tus manos y tus pies descalzos...a veces yo también he sentido lo mismo, a veces sientes que no queda nada por qué abrir los ojos cada mañana, sientes que te han robado las energías para vivir y te sientes desprotegido, solitario, miras a tu alrededor mas no hay nadie porque cada cual quiere entender su propio nido de temores y angustias que oprimen aquel frágil corazón...en esta larga caminata nos cubre un manto de estrellas que esperan con ansias que les regalemos solo un minuto para observar su belleza, el viento agita nuestro cabello y nos acaricia con suavidad esperando un momento de atención, esperando que solo deparemos en la suavidad de su roce en nuestro rostro; caminamos tan rápido que no deparamos en las miles de arrugadas manos que se extienden para tocar nuestras jóvenes manos, tampoco nos detenemos a reconocer aquellos ojos que esperan una dulce mirada y una palabra, sólo caminamos, sólo caminas, cada vez más rápido, cada vez como una roca con dos piernas que se mueve en este vertiginoso mundo.....los poetas ya no quieren verter palabras en aquellos suaves papeles, el viento ya no baila su danza habitual, los niños ya no quieren sonreír, tienen miedo, los cubre la tristeza de la lejanía de un día de sol...no quiero que veas todas estas decadencias del corazón, por eso sólo te las cuento, sólo tus oídos sabrán lo que sucede a tu alrededor, tus ojos no se abrirán aun, no quiero que lágrimas amargas los bañen de tristeza...cuando lleguemos a un lugar más bello, un lugar sólo para ti, donde puedas ser quien eres, solo ahí permitiré que abras tus bellos ojos, solo ahí...


ANITA ...