...Miré el horizonte mientras cortaba el pasto verde del jardín presidencial...
Ahí pasó esa ráfaga de buitres vomitando fuego...Creo que fue hace unos veintitantos años que pasó, aun lo recuerdo, siempre que me esmero en saber que sucedió me terminan doliendo las costillas y me arden unas heridas invisibles que se pasean por todo mi cuerpo...

Ah, otra vez el perro ese me dejó su regalito tendido, que se cree, que me contrató el estado para ser su conserje de baño? - exclamó al aire tomando la palita que tenía unos centímetros más allá

De pronto vio como una bota gruesa recién lustrada se asomaba bajos sus ancianas manos entierradas

Alcé la vista lentamente y me fijé en como me increpaba burlesco tocándose el bigote de Dalí con tono grosero.

Pisé su mano y le grité en la cara:

Y usted que hace acá ¿no sabe que estamos en guerra caballero?

¿Y dónde los cuarteles? - repicó enojado el viejo mirándolo con desprecio...

A ya veo, esto se debe a un trauma muy severo, es común en gente como usted, golpeada durante toda una vida con el resentimiento...

Ah, ¡¡deténgase me hace daño eñor!!, me duele, no no... - gritaba el viejo por la plaza

El perro chilló con la primera descarga y se esparció corriendo por la calle.

No te gusta regar las plantitas maricón ¿ah? ahora vay a ver po...¿ así que votaste por el huevoncito ese que se está quemando? - Le dije heroico con un gusto increíble

Seguía corriendo, esquivó una micro y pasó la alameda como el viento en la pampa. El instinto de una fuerza mayor le indicaba el camino, y el animal, fiero y tierno a la vez, con sus patas acalambradas, seguía, a pesar del temor cargando el paquete sagrado...

...han dejado huellas profundas y los conflictos armados inquietan el inconsciente colectivo. Seguramente usted refleja lo que su padre vivió en carne propia. Se debe a una falla en el ello. Pero dígame...

Uno, dos, tres...dale más hueón, o ¿acaso no erí un oficial de las gloriosas fuerzas libertadoras de la armada de Chile? - me olía raro ese raso, así que tomé la justicia por mis manos y mientras pasaban los de la FACH surcando el cielo todavía como el Condor que llena nuestro escudo hijo mío...

Perrito, así que tu erai el que me dejaba regalitos... Ya si no te voy a pegar, venga... Tome, tengame esto, eso pue... oye, no te lleves eso...perro...ven ven, a la cresta se llevó mi agenda... pero si , como tan pavo pa llevarla ahora, mientras trabajo... ah mi dios, y tenía ahí todos mis poemas... - exclamó el viejo con desolación, hasta que alguien lo increpó con una patada en la espalda que lo botó hasta comer de las flores que tanto cuidaba.

Recuerdo que vi esos aviones quemando el blanco edificio con la silueta del presidente en la ventana por televisión. Pensé entonces en mi papá...
¿Qué le habrá pasado a mi papá? Yo tenía cinco años entonces, y sé que ese día fue a trabajar, pero jamás supe nada de él... Hasta anteayer, cuando encontré sus poemas. Los tenía una señora que vendía diarios en San Diego. la encontré por casualidad. Le compré el mercurio porque salió un reportaje respecto al caso del patio 29 y entre conversa y conversa me mostró algo que ella guardaba como tesoro, entonces me percaté que era lo que había buscado toda mi vida.
Me dijo que sintió los bombardeos en la moneda, cerraba su local y en eso llega un perro a rastras, corriendo como una bala y se paró frente a ella. Le entregó la agenda de mi papá y luego se murió, así de simple. Le tiró los escritos en los pies y luego se desvaneció al suelo

El huevoncito lloraba en la plaza. Así que ya sabe hijo mío, a estos maracos de los comunachos hay que darles duro, son antipatriotas y comeguaguas...entendió? - lo instigó con fuerza como lo conocían sus soldados. Era el más temido de muchos coroneles...

Si papi... - dijo el pequeño niño con la cara colorada y sonriendo sin entender mucho

Ahora, cada vez que leo sus poemas y pensamientos, creo que las costillas se me apesadumbran. Me arde todo. como le decía doctor, mi papá votó por Allende y tenía cédula de identificación del partido comunista. De eso me enteré muchos años después. Pero nunca creí que fuera motivo de castigo o en su caso, desaparición... - terminó de decirlo con un tono medio de vergüenza y una lágrima a medio caer del ojo que se medio cerraba


Bueno, que lástima declararle esto, pero yo no puedo ayudarlo...
La verdad es que mi propio padre fue uno de los militares que reprimió en esos años, y bueno, de los que trabajaron para hacer cosas tan terribles como lo que le debe haber sucedido a su padre . Él estuvo involucrado en una serie de crímenes y detenciones... ahora que lo miro a la distancia - el psiquiátra se sacó los lentes y se tomó la frente - creo entender su pesar. Hombres como mi padre fueron victimarios y asesinos, así de simple, por su parte, gente como el suyo se llevó la peor parte de la historia, y le pasó la cuenta a sus hijos, nietos, esposas, ciertamente le pido perdón de corazón... - se quebró y lloró desconsoladamente recordando aquellos momentos en que el coronel lo hacía pasar revista de los juguetes y soldados de plomo en su cuarto cada noche.

Lo entiendo doctor, no se preocupe, creo que debiera tomarse un vaso de agua...