Observo la noche estrellada, en el balcón de mi cuarto, completamente sola, veia la Luna y sus pequeñas pero hermosas compañeras, primero mi sonrisa se conserva, pero a medida que el tiempo pasaba y observaba la tierna luz con la que me apuntaba la Luna, comenze a derramar lagrimas, en realidad, no se porque lo hize, si mi conciencia estaba limpia...pero...una cruda realidad acosaba mis pensamientos día y noche, veía a mi amado, al hombre de mi vida, abrazando a otra persona, me quede atonita, mis ojos no lo creían, comenzé a correr, no se cuanto tiempo, pero mi corazón a medida que avanzaba, se me desgarraba, por el frío, por ese sentimiento...llegúe a mi casa, y lloré en los brazos de mi madre, despues de un rato, me subió a mi cuarto y me arropo con mis sabanas, al despertar, me sentía mas tranquila,¿porque?¿porque me sentía tan bien? mis ojos ni una lagrima derramaron, pero ahora que estoy aqui, juzgando ante la luz de la Luna, lo que he perdido, pidiendo que no pierda mas, pidiendo justicia ante el sufrimiento, que no me abatiera mas, observe la Luna una ves mas, seque mi última lagrima con furia y sonreí ante ella, nunca mas me intimidare, nunca mas me dejare humillar, dormire tranquilamente, esperando otravez,encontrarme ante ti, mi dulce juez de la noche, mi dulce resplandor lunar. No mirare hacia atrás.