Quisiera esta noche embriagarme de tí, quisiera escribir al filo de tus labios sin dormir, fabricar entre tus brazos el gran cristal que aguarde la luna de mis días perdidos.


El tiempo pasa, las personas pasan, y sigo aquí sin atreverme a cruzar tu línea de fuego, a esperar que el viento me traiga todas las respuestas a las preguntas que no tengo.

Quisiera esta noche mirar en tus ojos. Quisiera recordar tus risas calladas mordiendo los vestigios del primer amor nunca olvidado... Quisiera cantar bajo el placard violeta, degastar las ilusiones que brotan como hierba cada vez que te veo y cada vez que no te veo.

Quisiera al fin terminar la historia que prometí, quisiera tomar tus manos y volar hasta el fin, sin cuerpos, sin miedos, solo con el corazón esperanzado una vez más...

Quisiera... quisiera querer, amar y murmurar los silencios que nos hacen cómplices.


Tener bajo el calendario los sueños que derramé de niño, los recuerdos que con los años se fueron...
Quizás vuelva este otoño disfrazado de ángel, sólo a matar las melancolías que tanto cantan en mi cama cada noche, y aún dormido en los laureles de tu jardín abreviar en dos palabras lo que tanto me ahoga bajo la luna llena...