Lo Contrario

Si quieres mentirle,
Miéntele
Para que sea feliz
Pero no la toques.

Dile que quieres entregarle
Esa estrella
Que guardas en el cajón
De la mesita de noche.

Dásela,
Déjala que contemple su rostro
Bajo el fulgor de ese lucero
Pero no la mires.

Cierra los ojos
Poco a poco
Mientras el perfume de ella inunda el dormitorio
Pero no la huelas.

No la toques,
No la mires,
No la sueñes
Déjala que piense que no eres capaz de amarla…
Como a mí,
Déjala que piense que no puede ofrecerte nada
Que no te haya dado yo
Así se creerá de una vez
Por todas
que tu y yo somos iguales
Y digas lo que digas
después no podrás convencerla
De lo
Contrario.