ME DICEN QUE

Me dicen que ya no lea,
que abandone con premura las sábanas letradas
con que me sacio el hambre de placer, y me curo el frío del aburrimiento,
la paz mortal de los mortales.
Me dicen que ya no escriba,
que aquiete urgente mis raíces
con orden de no trepar más nunca los muros del condenado dolor.
Me dicen que ya no beba,
que acueste a añejar mis vinos en las zanjas del olvido,
entre la tierra insana oscura de garabatos morados.
Me dicen que ya no piense,
que calle las alas, que apague los vientos,
que duerma sobre las aguas de la barbarie común
para que pueda morder de la común felicidad.
Me dicen que ya no lea,
que ya no escriba,
que ya no beba,
que ya no sea.


Agosto 15/03