Dígame si lo que cuelga de la luna es un rosario de amarguras, frágil reflejo en el lago de mi corazón. No alcanzo a confirmar si es mi locura la que provoca en esta noche tanto dolor. Acaso es el destello de esa estrella que por iluminar una lagrima certera deja desnuda una desilusión. Y esta noche que acompaña y me desvela hace amagos por disfrazar la tristeza en su humilde compasión. Yo solo quiero, dormirme y no temerla, sin pensar que mañana salga el sol.
Texto agregado el 15-10-2007, y leído por 538 visitantes. (26 votos)