Proverbio 10 para loscuentos.net

Abraham Lincoln 809-1865), decimosexto presidente de los Estados Unidos

Aliviar la pena de otro ayuda a olvidar la propia.

Cuánta verdad se encuentra en esa frase. Las personas están sumergidas en sus propios problemas, sean cuales sean esos. Si es una enfermedad, como uno nadie sufre, parece que se tiene un monopolio sobre tal dolencia. Si es un problema familiar, en la historia de la humanidad nunca hubo un drama como el de uno. Muchos tratan de exagerar lo propio para poner el foco de la atención sobre si mismos. Pero si uno se pone en contacto con otra persona disminuida por una enfermedad o un problema familiar, se puede dar cuenta que la enfermedad que se creía tan importante, queda anulada al lado del otro que está parapléjico y que lo único que puede mover son los ojos, o a otro que le tuvieron que cortar una pierna por una gangrena, y que los problemas familiares que se creían tan importantes, quedan pequeños al lado de esa familia que en un accidente perdió a varios miembros entre ellos hijos. Y si todavía se emite como por reflejo una queja que otra, si se tuviese la apertura espiritual de ayudar a esos seres realmente afligidos, el recuerdo de las propias dificultades quedarían en el pasado. Porque no hay nada más cierto que ayudar a otros es olvidar lo de uno.