[...por qué no estás ahí?

por qué no te oigo.. no entiendo..]

Déjame decirte que estos días han sido más largos, que mi vida no es ni más ni menos mierda que lo que ayer veías, que la brisa ya no sopla a la sombra de mis versos y me sigo perdiendo en los bosques de la soledad intensa.

Déjame también contarte que la ciudad es lo mismo, siempre gritos riñas gente luces putas y tabernas, que las calles siempre marcan el destino de unos cuantos que no se toman un minuto para tomar la pasarela..

Debes saber también que el clima no ha variado pero la lluvia siempre gris anhela volver a sentir tus manos, el sol sale más triste, la luna ya no platica con lo que queda de las sombras de los sauces que alumbraste cada mañana con el reflejo de lo que te quedaba de vida, de vida.. mierda

[Mientras me seco el llanto] deberías tambien ver a los amigos que quedaron, siempre crecen asonantes como un día imaginaste que lo harían.. Ninguno ha superado el impacto de tu ausencia ni la falta de emoción en lo que solía ser tu asiento, en la misma esquina de siempre, la sonrisa acostumbrada, déjame comentarte que el salón cada mañana no es el mismo que era antes ni nos quedan esperanzas, sólo un recuerdo que darte y visitarte cada cuanto para imaginar verte a los ojos...

...y sentir que aún te ríes y me das unas palmadas en la espalda mientras suave me susurras al oido "sigue amigo mío, sigue, que desde aquí te cuido"

Y sin más que comentarte en este boletín falaz solo quisiera que supieras que las flores que pisaste y el jardín en que jugabas está más verde que nunca y la mirada desolada de las paredes mudas que te verían crecer son ahora quienes ríen por el recuerdo sincero de aquellas travesuras, relojes atrasados y musas rotas que en vida dejaste.

Se despide atentamente,
aquel que sigue aquí extrañando tu recuerdo

[Cierro la pluma, doblo el papel y lo dejo junto a la placa con tu nombre y una cruz, dos fechas resaltadas y un espíritu en descanso más no en soledad]

--Descansa en paz Mario