ESA NOCHE HÚMEDA EN TUS LABIOS
Era un sueño,
yo lo sabía,
pues solo ahí podría tenerte entre mis brazos
sin tenerle miedo al mundo.
En aquel espacio absolútamente íntimo
nuestros cuerpos se dejaban sentir,
cálidos,
temblorosos,
acaso tímidos,
podía sentir tus manos recorriendo mi espalda,
tus dedos ejerciendo una exitante presión,
tus uñas dejando rojos surcos.
Podía sentir la humedad de tus muslos entre mis manos,
y mis dedos sobre tu piel corrían sin miedo,
sin frenos,
buscando valles y montañas,
desplazando el sudor q mana de tus poros,
provocando un leve temblor en tu cuerpo...
Tus ojos cerrados,
tus labios abiertos,
tu cabello inundando la almohada,
tus brazos adormecidos,
tus manos rasgando las sábanas,
retorciendo la almohada
tus piernas calientes,
tus rodillas totalmente separadas
tus senos descubiertos
tu cuello marcado por mis dientes
y tu vientre,
tu vientre sube y desciende
sube y desciende,
sube y desciende...
Tu rostro esboza un gesto
aquel q representa el más puro placer
y al verte siento
hacerse infinitamente enorme
la emoción por poseerte.
No existe ahora
espacio entre mi pecho y el tuyo
un fino rayo de sol no podría atravesar nuestros cuerpos
la fuerza de un huracán no podría separarlos.
Se deja sentir en el aire
un armónico concierto
provocado en gran parte
por el balanceo de nuestros cuerpos,
el roce de las sábanas,
y deliciosamente complementado
por los débiles gemidos
que tratas de ahogar
cubriendo tu boca con una mano...
Siento un mar contenido dentro de mí,
hasta el aliento me ha faltado
mi respiración es entre cortada, pausada,ruidosa,
mis manos están confundidas
y recorren ahora sin delicadeza cada centímetro de tu cuerpo,
presionando.
La manera en q se sacude tu cuerpo
y la sensualidad de tus gemidos
(que se sienten como débiles llantos y quejidos)
acaban por quebrar el dique,
hacen desbordar el mar contenido,
y se deja sentir en toda la habitación
elevarse la temperatura
hasta empañar los vidrios,
hasta derretir la velas,
hasta chorrear las pinturas colgadas en la pared,
hasta incendiar el cochón húmedo de nuestros cuerpos...
En un segundo de absoluto silencio
donde sólo se pueden percibir los latidos de nuestros corazones,
observo tus labios,
la humedad de tus labios,
y el suave brillo q tienen
se vuele intenso en un momento,
y me encuentro parado frente a mi ventana,
solo,
totalmente solo,
con la mirada perdida en algún punto lejano...
te ansío, te deseo, te espero.....
Randy |