Personas que nunca imaginaste, personas que tenían un aspecto extraño, que parecían incapaces de querer a alguien, ahora tienen pseudónimos como: “te amo vida sabes q nunk me podría enojar contigo” o “tu veneno corre por mis venas”.
Personas de aspecto extraño.
Mujeres futbolistas, obesos, mujeres muy pequeñas y delgadas, chicos afeminados.
Las personas que siempre parecieron interesantes, tienen pseudónimos como: “quiero mi BURBUJA de vuelta” o “el Papa Benedicto es un adicto” o “infinita tristeza”.
Le escribo un mail.
7 cigarrillos diarios.
época de mangos.
2 libros en una semana. Conrad y Moore. Lorrie Moore
mucho calor al levantarse.
Nunca me ha devuelto los mails.
Pero tengo la certeza, y no sé porque, de que sí los lee.
De que lo hace más de una vez. Y de que le causan gracia, y por eso ríe.
Otro mail:
en el índice de El Aleph, se menciona a la muerte tres veces.
algo me dice que en todo el libro, son las únicas tres veces que se le menciona.
pero quizás ese algo me dice mal y me equivoque.
siempre me equivoco de todas maneras.
No puedo estar con él por razones obvias.
Aunque puedo decir que lo más obvio, lo más común, es, casi siempre, el miedo.
Tercer mail:
Tengo miedo de engordar.
de que las otras personas se mueran.
de perder mi sensibilidad.
de que dejen de fabricar chocolates.
de trabajar en una oficina.
de tener que tirar con el jefe.
de no enamorarme jamás.
Nos conocemos poco.
hoy descubrí que los libros de Paolo Coehlo son los mejores para trancar
puertas.
grandes, pesados, inútiles.
Decir que lo amo es exagerado, innecesario.
Pero le tengo confianza.
No siento vergüenza.
Al contrario, me siento cómoda.
Eso es, con él me siento cómoda.
día nublado.
15 cigarrillos.
polera celeste manga larga y los pies desnudos.
Bob.
Dylan. Por supuesto.
A él le encantan los días nublados.
Especialmente para hacer el amor.
(Yo, personalmente, no conozco de esas cosas, prefiero fumarme un cigarrillo, siempre, toda la vida).
muchas lágrimas.
ojos hinchados como pelotas imposibles de ocultar.
nada de hambre.
te adjunto una foto, para que veas mis ojos (mis nuevas pelotas).
Mail relevante:
hoy me he dado cuenta que te quiero.
te quiero porque nunca respondes.
y entonces, para mí, te has convertido en una especie de Dios.
Cambio mi pseudónimo: FELICIDAD
“Infinita tristeza” le pregunta a “felicidad” porque se ha puesto ese pseudónimo.
“Felicidad” le ha respondido que no le va a decir por qué, “felicidad” nunca le ha preguntado a “infinita tristeza” por qué el pseudónimo.
“Felicidad” no admite más a “infinita tristeza”.